jueves, febrero 23, 2006

IV Jornadas Infodiez

Llegan la IV Jornadas Infodiez:
Mis compañeros del Grupo DIEZ, lanzan sus jornadas para profesionales y estudiantes, que anualmente recabana la mirada de la comunidad universtaria y medios de comunicación. Consolidándose año a año como un referente en eventos sobre TIC en la ciudad de Zaragoza.

Para más información: www.infodiez.es

Interraileros TEAM

Mi amigo Jacobo se incorpora como comentarista-administrador para el desarrollo del blog.

jueves, febrero 09, 2006

¿QUÍEN DIJO FERRY?



Aventuras en Ferry:

La Ida, fuimos unos pringados, y nos subimos a la cubierta a dormir. Lugar en el cual los mejores sitios estaban ocupados. A pesar de esto y con valor, nos agrupamos, cenamos allí, y nos cobijamos juntos para dormir la noche, entre sacos, el suelo y el temblor del motor. Una Experiencia.
A la mañana siguiente cuando me levanté, me sentía como un auténtico indigente y me daba vergüenza bajar al baño de abajo.

En la vuelta, nos aprendimos la lección, pillamos sitios en asientos buenos, abajo, y algunos dormimos en el suelo enmoquetado, pero estirados.

Creo que si te lo sabes montar (cartas, ajedrez, juegos y charlas), te lo pasas de puta madre.
Porfi, acordaos de mí, poneos en la proa del barco “estilo Titanic” y gritar <> (Jiji...)

Huelgas de trenes, autobuses, feries, Averías de trenes.
No suelen ser muy a menudo pero si te tocan Joden un Huevo:

En Francia, nos pilló una huelga que nos la solucionaron poniéndonos un pepino de tren, un TGV (alta velocidad), así da gusto.
Allí también se jodió un tren que íbamos a coger, y tuvimos que desviarnos, hacer un par de transbordos para finalmente llegar a la ciudad.

En París fuimos a coger un metro, y había tenido un accidente nos desviamos, y fin.
(El tren de cercanías para ir de París a Versalles, es gratis con el billete de interrail, pero hay que enseñar el billete en una taquilla para que te lo den. Me planté sacar varios y empezárselos a vender a la gente...)

A la vuelta de nuestro viaje, hubo una huelga en Italia, y mucha gente tenía comprado el billete de avión, y les jodió porque tenían previsto una ruta, y al final no se que les pasaría a todos, nosotros estábamos ya casi de vuelta, y no tuvimos problema para pillar un autobús.
Otras chicas que nos encontramos en Venecia, les pilló en la ciudad, estaban de paso, y no tenían sitio para dormir, así que supongo que se mantendrían despiertas hasta el día siguiente.

Rezo, para que no os coja una huelga de trenes en Grecia, porque con lo mal que tratan a los INTERRAILEROS, y la ineficiencia en la gestión del tránsito, se puede formar una pelota que os acordaréis siempre. (De hecho lo que nos pasó a todos nosotros... creo que ya es bastante vergonzoso)

Consejo: en estos casos conviene llevar una buena guía del país con la red ferroviaria, y más soluciones, las guías “Lonely Planet” suelen ser buenas, no turísticas, pero te resuelven cantidad de dudas y problemas en el país. Podéis consultarlas en el CIPAJ, allí es donde preparamos nuestra segunda partida, existe internet, y libros de consulta.

PAGA LO JUSTO


AHÓRRATE DINERO (Trucos):

No siempre pagues el billete de autobús:

Florencia, Bari, ... muchos buses de estas ciudades tienen entrada delantera y trasera, y se marca el billete una vez dentro. Lo que nosotros (no todos) hacíamos era entrar por detrás ponernos cerca del verificador, pero no fichar. Así vigilábamos y se entraba el revisor, fichábamos rápidamente. (Yo os lo comento, luego cada uno que haga lo que quiera)

Falsificación Erasmus:

Algunos de los estudiantes Españoles, de Historia del Arte, que viajan al extranjero, consigue una acreditación que les permite visitar los museos de forma gratuita.
En Italia sirve para todos, excepto los que son propiedad de la iglesia, que no se salva ni Dios de pagar.
(A partir de ahí cada uno que se las ingenie como pueda...)

Carné de Estudiante:

Si vamos a lo legal, podemos obtener descuentos por ser estudiante internacional, e incluso en determinados lugares entrada gratuita (Delfos, Acrópolis, la ágora de Atenas...)
Auque si vamos de nuevo a lo pillo... También podemos justificar que somos “estudiantes internacionales” con el carné joven de aquí, (Auque no es lo correcto pero en muchos sitios nos ha servido.) (En la Acrópolis como había tanta gente en fila “Diciendo We are students” tiramos pa’ dentro gratis)
Menores de 18: entran gratis:

Si eres menor de 18 años y tus padres o tutores te lo permiten, ¡¡ Vete ya de tu casa!! Porque Vas a poder entrar gratis en multitud de museos y lugares turísticos de interés.
Razón por la cual en mi primer viaje, nos ahorramos una pasta gansa. (Francia es un chollo si eres menor, además de que es muy bonita, Italia ya permite menos, y Grecia también da juego...)

Cuando la fila era mediana y la entrada se podía sacar en varias ventanillas, nos dividíamos en tres, y la menor sacaba tres entradas gratis en las tres diferentes taquillas, cuando mucho tráfico y los del museo ni se enteran.
Nota: En ocasiones para licitar la entrada de un menor, es necesario que le acompañe un mayor de edad. (tus amigos) Depende del país te piden el Dni o no, para comprobar tu edad.

Si estás pobre, quieres entrar, prueba a echarle cara en determinados sitios, como el Museo de Louvre existen varias entradas prueba no en todas piden Dni o entrada (para esto tienes que decir “Seventeen years old” y tener cara de chavalete, o de lo contrario te pillarán... También se puede hacer en los jardines de versalles.)

UNA DE PARAGUAS


Por favor, llevaros paraguas y capa de agua, si leéis esto y se os olvida comprenderéis porque lo escribí.

Aunque por si acaso os prevengo:

Estrasburgo (Francia) sede del Parlamento europeo , una ciudad superguapa. Pero llegamos de noche, con un tiempo de mierda, y con el puto albergue más lejano, que jamás he visto. (En la ciudad hay dos, uno en el centro y otro acojonantemente lejos)

Pues si era poco caminar cerca de 4 – 5 km desde la estación, con las mochilas cargadas, se nos puso a llover a mitad de viaje, nos perdimos en un polígono industrial, porque el albergue estaba tan lejos que no salía en el mapa de la ciudad.
Unos franceses jóvenes y simpáticos, al vernos, se ofrecieron a llevarnos pero solo cabían dos, así que soportamos el trago todos juntos.
Extasiados, y discutiendo estuvimos casi a punto de quedarnos a dormir debajo del puente de un tren, otra posibilidad era caminar otro cacho hasta un Formula 1 (pensión barata en Francia) o caminar hasta el final. Hubo consenso y llegamos al albergue.

Pero el cabrón del recepcionista, que estaba medio dormido, casi nos tima diciendo que dejaramos allí las tarjetas de crédito. Y una puta mierda, al final lo arreglamos, pagamos y más que dormir nos secamos en la camica.

Florencia (Italia), caminando desde el albergue a la estación, por cierto, también lejano (por ahorrar), para ver Pisa.
Miramos al cielo. ¡Mira coño! ... Pues... Parece que va a llover. ¡BRUMMM! tromba de agua épica, todos calaos y los negritos vendedores, intentándonos vender un paraguas (en esos momentos era cuando de oro)
Pero como buenos INTERRALEROS, ¡Tachán! Paraguas y capa, así que sobrevivimos a la tempestad.

COMO PIPIOLOS INTERRAILEROS



Bajaba las escaleras del instituto apresurado, cuando alguien me gritó,“Miguel”. Dándome la vuelta le vi, se trataba de Jacobo un estudiante de 2º de bachiller, se acercó a mí. Y me propuso una experiencia que nunca olvidaré.
Yo era un chaval de 17 años que nunca había “salido de casa”. Así que aquello que resonaba en mi cabeza, eran palabras de gloria tocando las más delicadas emociones.
¡¡¡ Europa!!!!
Este año, me estaba yendo bien así que aquella idea podía convertirse en realidad. Pero aún faltaba una última prueba de fuego, --SELECTIVIDAD—parecía la más duro, pero sabía que era la única forma de cumplir mi ilusión.

Así que, presto me preparé para la carrera:

Primer paso: Convencer a mi madre.
Mamá, hoy me he encontrado... Y me gustaría ir, porfa, porfa,... Si apruebo, me dejarás ir verdad...
Segundo paso, (y el más duro): Aprobar.
Tras arduas semanas de estudio, lo conseguí, aquella idea había motivado mis ansias, y por fin lo logré.
Tercer paso: Descubrir todo el pastel ante mi padre, para que suelte la pasta.

1. En condiciones normales suele ser el más difícil, y por tanto os recomiendo varias estrategias:
Tener lo más contento posible al pariente. (Sea como sea, estudios, peloteo... Montároslo como podáis)
2. Pedirles un préstamo a corto plazo, y asegurarles su devolución (Este fue mi método en la segunda ocasión... Pero aseguraos de que tenéis la forma para devolverles el dinero o no os lo volverán a prestar.)
3. Vuestros parientes tienen “guisa” y no les importa que os hagáis un viajecito, si es así, aprovechar que sois jóvenes para hacerlo.

Y finalmente cuando lo has conseguido, os aseguro, que en esos momentos eres muy feliz. JJJJ
Como pipiolos interraileros, en nuestro primer día.
Cansados de tren y con un hambre que te cagas, no se nos ocurrió otra idea (después de caminar por la estación) más que ponernos a cenar a las 9 de la noche, en la ciudad de Rennes ( Francia), en las proximidades de la estación.
Salimos afuera, era ya medio de noche, abrimos nuestras todavía vírgenes mochilas, y montamos el chiringuito.
Pues no pasaron tan solo 2 minutos, que el primer Wherys. Se nos acercó pidiendo dinero; tras unos segundos de decirle que no sabíamos “teóricamente francés” lo despachamos.
Dos minutos después, nos llega otro pesao, y tras fracasar pidiendo el típico euro. ¡Acojonante! ¡¡¡Ve el bocadillo de Jamón!!!, y como un muerto de hambre, nos pide un cacho. Tras darle la loncha y echarle unos berridos de ¡Alá a cascarla! Al final, se fue.
Entre risas, y cachondeo del muerto anterior, y con el bocadillo a mitad, vimos que se acercaba otro mongolo, y plegamos el surtidor móvil.

Consejo: En las proximidades de muchas estaciones, es donde encontraréis el mayor número de Wherys.
Así que como recomendación, aunque pueda parecer feo, abrir la mochila, sacar los embutidos y ponerse a cenar en la estación (si parece segura), muchas veces es lo que mejor puedes hacer antes, que ponerte a cenar en cualquier otro lugar. De todas formas nosotros solíamos cenar siempre en el Albergue, y las comidas las hacíamos en cualquier sitio (parques, zonas turísticas, plazas de la ciudad). Llevando en la mochila de “ataque”, la comida y los elementos necesarios para el día.

Entiéndase por WHERYS, toda aquella persona que no tiene buenas pintas, y es sospechosa de molestarnos (carteristas, mongolos, mendigos...)
El término se acuño por una historia de Jacobo: en la que un tío entraba en un bunker alemán, decía “ Where is my cofee?” y lo mataban. Como aquel día nos reímos un montón. Al final se quedó con nosotros.

Nuestra técnica era sencilla: Se medio gritaba WHERYS, y se decía su posición. (Esto no es necesario) Ejemplo: Wherys a la 1. Para decir que estaba delante, a las 3 = derecha, y así con todas las horas.

INTERRAIL EXPERIENCE

Al principio se suele carecer de las pequeñas picardías, para deshacerse de los molestos, desplazarte, consultar información y hablar con la gente.
Pero conforme avancéis en el viaje, veréis vuestra propia evolución personal.
En el Interrail, uno descubre sus habilidades, conoce mejor a sus amigos, y aprende a desenvolverse en distintas situaciones, idiomas, y problemas que de ninguna otra forma vivirás.
De todo lo que te suceda y consigas aprender, verás como resulta tremendamente enriquecedor, y muchas veces, pero muchas, muchas divertido.
Sencillamente, conseguirás abrir tus ojos y verás las cosas iguales, pero de manera diferente, porque aprendes de otras culturas, y maduras sin darte cuenta.
El primer interrail, su novedad, y sus fuertes emociones, es el que más huella consigue. Os lo garantizo, puedes conocer y ganar mayor afinidad con una persona en los días del viaje, que durante meses en tu ciudad.
Os acordáis de Gran Hermano, parecido, pero muchísimo mejor, monumentos, fiesta y LIBERTAD, lo avalan.

Para los más jóvenes he de decirles, que si nunca has estado mucho tiempo lejos de tus padres... al final tienes unas ganas tremendas, de volver a tu país.
Aunque esto, dependerá de cómo te tomes el viaje.

Porque hay formas, y formas:
1.Correr, y verlo todo:

Veis muchísimas cosas, pero acabas muy cansado, y con ganas de dormir pronto, y los trenes acaban siendo una “cama” porque siempre estás dormido.

2.Visitar bastante, pero tranquilos:

La mejor opción (mi segundo interrail) Hay que ver el mundo, pero comiendo helados (Jaja...) El viaje fue muy bueno por la compañía, y porque comprendí la filosofía de las chicas ( “Vamos a andar con calma pero vamos a andar”; aunque cuando merecía la ocasión aplicaba la mía “sólo voy a vivir una vez, y esto no lo volveré a ver”)

3.Trenes, monumentos y fiesta:

La más “radical”. No la he experimentado, tal vez en el próximo viaje lo haga.
De momento no lo he hecho, pensé que España ya tenía bastante fiesta, y creía que si salía afuera era para ver algo más, que a mis amigos pedo.

Aunque como os digo, actualmente me apetece la última.